Rabia llegado finalmente a mi nuevo hogar en Kumogakure, había decidido recluirme en lo profundo del Bosque de Bambú, cerca de un pequeño riachuelo que corría suavemente a lo largo del bosque, el lugar era muy tranquilo, se escuchaban algunos ruidos de la naturaleza como el cantar de las aves, también una sutil brisa que hacia danzar libremente a las largas varas de los arboles de bambú, era temprano por la mañana así que al entrar a la residencia note que tenia mucho tiempo sin usar, era una casa bastante amplia con una chimenea muy acogedora, pero el lugar estaba lleno de polvo así que me puse a limpiar un poco para darle mas vida al lugar ya que de ahora en adelante seria mi hogar, cuando había limpiado ya una buena parte fui a darme un baño en el riachuelo, había una parte un poco mas profunda que formaba un pequeño pozo donde máximo entrarían dos personas cómodamente, disfrute mi baño en la tranquilidad de aquel bosque pero ya era momento de ir a entrenar, tenia muchas cosas que aprender y no tenia tanto tiempo, así que salí tome una toalla me seque y me puse ropa limpia. Camine hasta la cocina y vi que no habían cosas para comer así que por ese día tendría que pasar hambre hasta que comprara algunos ingredientes para cocinar, así que sin comer solo debía ir hacia algún área de entrenamiento para practicar un rato, para luego ir a comer un poco.